La Bolsa Mágica está llena de duendes, de cuentos, de baile y de niños. El espacio, justo enfrente del Retiro, es tan completo que resulta indescriptible en una palabra. Es juguetería, librería, centro de talleres de múltiples disciplinas, espacio para fiestas y cumpleaños y escenario de teatro y títeres. Un mundo acogedor, estimulante, que enamora a hijos y a padres, que recuerdan su propia infancia. Porque Elena González, su dueña, quiere que los niños que pasan por aquí piensen de mayores que “de pequeños iban a un sitio mágico”, el mejor recuerdo posible. Sigue leyendo… Publicado en Madrid Diferente con Niños